De nuevo, cuando hay que ordenar el estudio, preparar papel para pintar o similares, suelo echar un vistazo a viejas carpetas, recuerdos, y salen cosas como éstas,
...un pequeño apunte de 1996, desde la espalda del Archivo de Indias, mirando la Puerta del Príncipe de la Catedral de Sevilla...
...o éste 50 x 70 cm. de 1997, intentando "cazar" un rayo de luz en una mesa del estudio llena de chismes...
... o éste 50 x 70 cm. del mismo año, obra realizada en respuesta a una convocatoria de la Agrupación de Acuarelistas de Andalucía, para realizar una exposición itinerante por diversas ciudades de la Comunidad Andaluza en conmemoración del centenario del nacimiento (1898) de Federico García Lorca... Se trataba de basar la obra en un poema lorquiano. Escogí uno del "Poema del Cante Jondo" que dice:
"En las torres
amarillas
doblan las campanas.
Sobre los vientos
amarillos,
se abren las campanadas.
Por un camino va
la muerte, coronada
de azahares marchitos.
etc..."
No escogieron la obra. Seleccionaron (jurado formado por un catedrático de Bellas Artes, un Catedrático de Historia del Arte y un Crítico de ABC...) otro 50 x 70 cm. que presenté, menos dramático y frío... Sin embargo, me quedó la pena de que nadie leyera el poema que inspiraba la obra; que los miembros del jurado se quedaran con la obra más complaciente, estéticamente "correcta"...
¿O es que, quizá, la obra "no valga un pimiento"? ¡Hum!